DIRECTOR

Paolo Bianchini.

Esta película cuenta la historia de dos largos viajes que se cruzan entre África y Europa. La primera, es la de Yaguine y Fodè, dos adolescentes guineanos que escriben en nombre de todos los jóvenes africanos, una carta pidiendo la ayuda necesaria para tener acceso a educación, comida y atención médica. La segunda, 10 años después, es la de los jóvenes Thabo y Rocco quienes viven un increíble viaje que los lleva desde Bari a N'Dula. 

El realizador y guionista italiano Paolo Bianchini (Roma, 1931) inició su carrera cinematográfica en los años 50 siendo asistente de dirección para directores de la talla de Mario Monicelli, Luigi Comencini, Vittorio De Sica, Mauro Bolognini, Pier Paolo Pasolini y, en particular, Luigi Zampa, con quien colaboró en varias ocasiones. Sin embargo, desde mediados de los años 60, Bianchini como director y guionista fue un activo especialista de películas de bajo presupuesto de diversos géneros (acción, western, thriller, comedias…). En los últimos años ha estado dedicado más a la televisión dirigiendo cintas para este medio.  

Su regreso al cine fue con la cinta La grande quercia (1997) que fue un éxito de publico y obtuvo varios reconocimientos en diversos festivales como Berlín (premio de la crítica a su protagonista), y Chicago, entre otros. En 2002 fue designado Embajador de UNICEF por su compromiso con temáticas infantiles mostradas en sus películas para la televisión. 

Rodado entre Africa e Italia, El sol adentro (Il sole dentro, 2012) está inspirada en la verdadera historia de los jóvenes guineanos Yanguine Koita y Fodé Tounkara, de 14 y 15 años respectivamente, que fueron encontrados muertos en el interior del tren de aterrizaje de un avión de Sabena que cubría la línea Conakry-Bruselas. Ocultos en tan peligroso habitáculo, cual polizones de su propio ataúd, habían perecido congelados sin ver cumplidos sus sueños. Con ellos tenían una carta, escrita en francés, que fue publicada por los medios de comunicación en todo el mundo.

Esta historia ya fue tratada en el film Un matin bonne heure (2006), coproducción franco-guineana, dirigida por Gahité Fofana. Además de esta trágica historia, Bianchini narra en su film la otra historia de dos jóvenes futbolistas en busca de un sueño.